Qué hay que saber de la relación entre ciclismo y próstata
La próstata forma parte del aparato reproductor del hombre (junto a los testículos y las vesículas seminales, ubicada debajo de la vejiga y delante del recto. Se trata de una glándula que puede enfermar, el comportamiento y las costumbres influyen determinantemente en la aparición de ciertos males. La práctica habitual de ciclismo puede derivar en alguna patología urológica, como puede ser la hiperplasia benigna de próstata
Recientes estudios han sido publicados en referencia a la relación que existe entre los ciclistas y los niveles de Antígeno Prostático Específico (PSA). Este marcador específico de la próstata se chequea alrededor de los 50 años, cuando los hombres acuden al urólogo. Este estudio presentó un informe en el que señalaba la elevación de este marcador prostático en aquellos que practicaban el ciclismo con regularidad.
En cualquier caso, no son pocas las afecciones dolorosas en esta parte del cuerpo asociadas a la afición del ciclismo. Entre las más negativas se encuentra la prostatitis o irritación crónica de la próstata, que es bastante incómoda y dolorosa.
Evitar problemas de próstata al montar en bici
La presión que ejerce el cuerpo al sentarse en los sillines de una bicicleta puede llegar a afectar a la próstata, sobre todo si el punto de apoyo no ofrece un diseño adaptado. El sillín de la bicicleta es la parte que va a sostener este delicado punto, por lo que debe ofrecer una forma cómoda, capaz de repartir el peso de forma equitativa.
El Sillín antiprostático de carretera ha sido diseñado con el objetivo de dar respuesta a diversas manifestaciones que se producen en la zona de los genitales. Unas soluciones válidas, tanto para los hombres como para las mujeres. La misión que tienen estos sillines es reducir al máximo el aplastamiento de las arterias, venas y nervios de esta parte del cuerpo humano.
En un principio, este exceso de peso puede dar lugar a un entumecimiento, dejando “dormida” esta parte. No obstante, en algunos casos, esto no se queda aquí y deriva en problemas que pueden resultar bastante graves. La pérdida de sensibilidad, la dificultad para orinar, los daños en el perineo… e incluso es posible que afecte a la fertilidad, a la mencionada próstata y a otras enfermedades.
Y es que, el cuerpo humano, no se adapta fácilmente a permanecer demasiado tiempo sentado en el sillín de una bici, pero los ciclistas no están por dar de lado su afición favorita a las primeras de cambio. Por este motivo, es necesario conocer la existencia del Sillin antiprostatico para protegerse la próstata y de otros posibles daños.
Cómo tiene que ser un sillín antiprostático
Este tipo de asientos para bicicletas son, ante todo, anatómicos y ergonómicos, buscando la mejor adaptación en su diseño para ofrecer una buena posición y colocación al perineo. Por lo tanto, deben presentar un canal amplio y completamente abierto en dirección longitudinal.
La función de esta vía, canal u orificio, no es otra que la de servir de apoyo directa y exclusivamente a los huesos de la pelvis, es decir, a las tuberosidades isquiáticas. De este modo, da igual la posición o postura que adopte el ciclista, ya que se estará evitando la comprensión de la región genital.
Por otro lado, también habrá que tener en cuenta la forma que ofrezca la punta del sillín, que debe apuntar en curva hacia abajo. De este modo, se permiten dos ventajas, por un lado, mejora notablemente el control de la bici y, por otro, evita el mencionado aplastamiento de los genitales externos cuando, por ejemplo, se coloca inclinadamente hacia abajo sobre el manillar.
En último lugar, también se deberá prestar atención a la superficie de apoyo que, como cabe imaginar, es fundamental. No en vano, la carga la soportan los huesos de la pelvis y este peso va a producir dolor y entumecimiento sobre todo en la zona de los glúteos. Si se quiere evitar pasar por estas molestias es interesante probar los sillones y ver qué diseño es el que mejor se adapta a la complexión física de cada persona, además de la postura específica con la que se pilote una bicicleta.
¿Funcionan los sillines antiprostáticos?
Aunque todo lo relacionado en este artículo permita suponer que ofrece ventajas a los ciclistas, la realidad es que no siempre es así. Es posible que muchos usuarios no se sientan cómodos utilizándolos, principalmente por que la presión, que se centra en determinados puntos concretos de la anatomía y que puede llegar a ser molesta para algunos.
Por otro lado, no suele ser un artículo adecuado para aquellas personas que presenten importantes dismetrías. Además, los que los han probado no aseguran que acabe definitivamente con el adormecimiento genital. En este sentido, hay que prestar atención también a la longitud y a la punta del asiento.
En términos generales, estos sillones funcionan, aunque es necesario tener en cuenta las características de cada ciclista. Cada usuario tiene un esqueleto diferente, la anchura de sus huesos es exclusiva.